(Refieriéndose al Oscar) Eres solo dos años más viejo que yo, querido. ¿Dónde has estado toda mi vida?
Tengo una confesión que hacer. Cuando yo ya estaba saliendo el útero de mi madre ya estaba ensayando mi discurso de agradecimiento a la Academia. Pero eso fue hace ya mucho, afortunadamente para vosotros yo ya lo he olvidado. Pero no he olvidado a quién dar las gracias. A la Academia por supuesto, por este extraordinario honor. A mis colegas nominados: Kenneth (Branagh), Nick (Nolte), Jonah (Hill) y a mi querido Max (Von Sydow). Estoy tan orgulloso de estar en vuestra compañía. Por supuesto, yo no estaría aquí si no fuera por Michael Mills y su encantadora película "Beginners". Y a mi compañero de pantalla, por supuesto, Ewan McGregor, ese artista soberbio con quién debería compartir felizmente este premio si yo tuviera algo de decencia, pero no. A todos los productores en en Olympus Films, especialmente Leslie Urdang y Miranda de Pencier.
A la gente de Focus, por su tremenda generosidad y apoyo. Y no menciono mi pequeña banda de agentes provocadores: Lou Pitt y su mujer Berta, Carter Cohn, Pippa Markham, Perry Zimel, quién se esforzó por mantenerme fuera de la cárcel. A mi hija Amanda, de quién siempre estoy orgulloso. Y finalmente a mi largamente sufrida esposa Elaine, quién merece el premio Nobel de la Paz por rescatarme cada día de mi vida. Muchas gracias.
Pulsa aquí para ver los Oscars de Christopher Plummer
Tengo una confesión que hacer. Cuando yo ya estaba saliendo el útero de mi madre ya estaba ensayando mi discurso de agradecimiento a la Academia. Pero eso fue hace ya mucho, afortunadamente para vosotros yo ya lo he olvidado. Pero no he olvidado a quién dar las gracias. A la Academia por supuesto, por este extraordinario honor. A mis colegas nominados: Kenneth (Branagh), Nick (Nolte), Jonah (Hill) y a mi querido Max (Von Sydow). Estoy tan orgulloso de estar en vuestra compañía. Por supuesto, yo no estaría aquí si no fuera por Michael Mills y su encantadora película "Beginners". Y a mi compañero de pantalla, por supuesto, Ewan McGregor, ese artista soberbio con quién debería compartir felizmente este premio si yo tuviera algo de decencia, pero no. A todos los productores en en Olympus Films, especialmente Leslie Urdang y Miranda de Pencier.
A la gente de Focus, por su tremenda generosidad y apoyo. Y no menciono mi pequeña banda de agentes provocadores: Lou Pitt y su mujer Berta, Carter Cohn, Pippa Markham, Perry Zimel, quién se esforzó por mantenerme fuera de la cárcel. A mi hija Amanda, de quién siempre estoy orgulloso. Y finalmente a mi largamente sufrida esposa Elaine, quién merece el premio Nobel de la Paz por rescatarme cada día de mi vida. Muchas gracias.
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